La jornada de paro y movilización del 10 de la CTA Micheli y otras organizaciones convocó a unas 40.000 personas en la Plaza de Mayo. A pesar de las limitaciones de la convocatoria (la CGT no paró, no se convocó a plenarios ni asambleas previas) hubo una fuerte presencia de algunos gremios de la CGT, como camioneros, y una destacada columna clasista en la que marcharon la AGD (UBA), ATE Sur, Sitraic y decenas de agrupaciones del movimiento obrero y combativo. La intención de Micheli y de Moyano de convertir una plaza obrera en un punto de apoyo de un armado político opositor-patronal, y la presencia de una pata de la Mesa de Enlace agraria, generó rechazo hasta en la propia base michelista. La movilización de miles por las reivindicaciones de los trabajadores mostró la urgencia de un plan de lucha y un paro nacional que sirva para ganar y no sólo para “plantear una agenda”.
El kirchnerismo salió a bloquear el paro y la marcha, jugándose abiertamente a la fractura de ATE. La presión del gobierno sobre la burocracia del gremio se expresó en una fractura de la directiva de ATE Capital, con un sector verde carnereando el paro junto a la azul. Lo mismo sucedió con otros sectores de la dirección de ATE completamente subordinados al gobierno, que dirigen seccionales y reparticiones en la provincia de Buenos Aires. La movilización masiva se logró superando esta presión patronal dentro de nuestro propio sindicato.
¿Qué política se da la oposición?
Los sectores combativos que integramos la Bermellón y tuvimos una destacada elección el año pasado y jugamos un rol central en todos los conflictos que se desarrollaron este año. Sectores importantes de la oposición dieron una pelea por convocar al paro y a la movilización en términos independientes. Son las posiciones que triunfaron en el INTI, en ambas seccionales de ATE Sur, en Educación de La Plata. Esta posición de lucha es la que impulso Tribuna Estatal y confluyó en una columna clasista en la Plaza de Mayo con 3000 luchadores de diversos gremios tomaron las reivindicaciones obreras y plantearon la necesidad de ir a un paro general.
Sin embargo, esta política no fue compartida por el conjunto de la oposición. La Corriente Rompiendo Cadenas-Agrupación Victor Choque (mayoría en las directivas de ATE sur), propuso marchar no a la Plaza de Mayo sino a una movilización paralela, que pasó completamente desapercibida. ATE Desde Abajo tuvo la misma posición, en el Ministerio de Trabajo votaron en asamblea no movilizarse a la Plaza con el mismo argumento, luego convocando a la marcha paralela sin mandato de asamblea. La "marrón clasista" (PTS) llamó directamente a no movilizarse. Los alineamientos de Micheli-Moyano con sectores patronales deben ser criticados y combatidos, como lo hace Tribuna Estatal sistemáticamente, pero no son excusas para vaciar una acción obrera correcta como un paro y movilización. Esto es colocarse en contra de una acción efectivamente progresiva, convoque quien convoque. Esta política es paralizante y, si fuera adoptada por los sectores combativos, lleva a la marginalidad.
Necesitamos reagrupar a las tendencias combativas del gremio para actuar en las crisis reales que estamos viviendo, para desarrollar la tendencia hacia la huelga general que recorre todas las luchas que han enfrentado el ajuste de Cristina y los gobernadores. Por la unidad en asambleas por encima de las divisiones sindicales estériles. Contra la escisión burocrática y pro-patronal de ATE y la CTA que destruye nuestra herramienta gremial. Por un congreso de bases y un plan de lucha de todos los estatales, vamos con todo al paro general.
Facundo Lahitte
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